Siendo consciente del escaso efecto que mi artículo de opinión va a causar en las elecciones a la Comunidad Autónoma Andaluza, lo publico ya, que luego se me hace tarde.

Nuestros compañeros andaluces, unos de los más machados por los infames gobernantes que tenemos que sufrir en este país, se han salvado (de momento) de una buena. Os pongo en antecedentes:

La responsable de sanidad de la región, la señora Montero, convocó contra viento y marea (contra el ministerio, de su mismo signo político; contra los colegios de farmacéuticos; contra la industria; y posiblemente contra la Constitución Española) un concurso para obtener una rebaja adicional sobre el precio de las moléculas más dispensadas en España. 

Estando en juego lo que estaba, nos parece ridículo que tan solo 11 laboratorios acudieran a la llamada de tan jugoso manjar (distribuir por ejemplo Omeprazol, en exclusiva, para toda Andalucía) Y después del paripé de la subasta, y de haber adjudicado provincias a algunos laboratorios, se pasó de un ahorro de 40 millones de euros a 9.3 millones. Pero es que además, a la hora de firmar, tan solo 4 laboratorios han acudido a la rubrica, alegando que la ministra Ana Mato ha advertido de la posible incostitucionalidad de la movida andaluza. 

Y dicho yo, amigos míos. Sabiendo que esto iba a acabar así. Que Bayer a ofrecido un ahorro de 0,005 euros por caja de Adiro ya que Ratiopharm ha pasado de la subasta. No sería mejor dedicar el tiempo de los funcionarios de Sanidad a cosas útiles de verdad, como revisar el motivo por el cual, cuando un médico sale de urgencia a curar a un paciente en su casa, tiene que ser el propio paciente quien aporte el Betadine y las gasas porque en el Centro de Salud se ha acabado. O valorar si realmente, los medicamentos que autorizamos para el tratamiento de tal o cual patología son útiles de verdad, o no lo son. A encargarse ellos de reducir la carga burocrática del médico de cabecera que sale a seis minutos por paciente. 

Os adjunto el enlace a la noticia en elglobal.net